martes, julio 25, 2006

Paseos

Los paseos a caballo con Ennis eran los más hermoso en la vida de Jack, los guardaba todos en su memoria como un tesoro en un cofre secreto, y en los momentos en que se sentía solo por allá en Texas, cuando no soportaba la cara fruncida de su suegro, las horas interminables que duraba su esposa frente a la calculadora sumando ganancias, o al ver lo malcriado e insoportable que podía ser su hijo a veces por culpa del mimo exagerado de sus suegros, se iba a cualquier sitio donde pudiera tener un poco de paz y mientras fingía leer el periódico, dormir una siesta o simplemente mirar al vacío, los extendía ante si como quien observa una colección de joyas preciosas, tratando de recrear en su mente cada momento de algún determinado paseo: el olor del bosque, el ruido de los cascos de los caballos sobre el húmedo suelo, el color de los rayos del sol filtrándose por las ramas de los pinos, y finalmente, el suave canturreo de Ennis mientras cabalgaban en silencio, quien se mantenía tranquilo y relajado mientras paseaban por los bosques que rodeaban el campamento, siempre cerca de ríos y arroyuelos y rodeados por la magnífica presencia de la naturaleza.

Casi siempre, Jack rogaba desde su corazón que estos días duraran más, que las horas se alargaran lo máximo posible para poder disfrutar de la compañía de Ennis en esos lugares de ensueño, que tal vez eran fríos, pero eran avasallantemente hermosos, y que le permitían soñar que si el paraíso que tanto pregonaban en las iglesias existe, no podía ser un lugar muy diferente a éste, colmado de belleza y paz.

En ocasiones Jack miraba a Ennis disimuladamente, con miedo de romper el hechizo de su canturreo inconsciente, sin poderse resistir a ver la suave expresión de su rostro y el verde de sus ojos que combinaba perfectamente con el color de la abundante vegetación, pero siempre ocurría que Ennis se daba cuenta, y luego de mirarlo con picardía y risa contenida, le soltaba un: “¿Se te perdió algo, muchacho?”, para luego reír alegremente de la expresión arrobada de su rostro. Esto constituía una especie de juego entre ambos, en el cual Jack siempre le contestaba de manera diferente, ésta ocasión le soltó un: -“No muchacho, solo me pareció escuchar cantar un grillo en un tu boca, pensé que te lo habías tragado”, y riendo a carcajadas aupaba al caballo a correr a galope, sabiendo que Ennis lo perseguiría, y que nada deseaba más que ser alcanzado.

La vida de Ennis y Jack estaba dividida en dos, y esta era la parte más corta y esperada, pero al ser tan felices en ella, les daba fuerza para seguir y volver a sus obligaciones del mundo “real” donde el Vendedor de Maquinaria Agrícola y el Vaquero de Oficios Múltiples vivían sus días.

5 comentarios:

pon dijo...

Por esos ratos de felicidad resistían el resto del tiempo; esos pocos ratos les llenaban de oxígenos los pulmones para todo el año y les encendían lucecitas en los ojos y les calentaban el corazón. Qué momentos tan bonitos, la felicidad viene siempre en pequeñas dosis, en píldoras que te permiten seguir adelante cuando ya no hay nada a lo que agarrarse.

Max dijo...

No hay nada mejor que amar a Jack.
Cuando estoy con él me lo imagino conmigo.
Si estamos separados puedo tocarle a mi lado.
No hay nada como amar a Jack.

Jack Twist. No puedo hacer otra cosa más que amarle.
Digo su nombre y se llena mi vida.
Nada conozco que supere amar a Jack.
Presente o ausente, mi amor por él lo invade todo.
Mi vida se desliza por las letras de su nombre.
Jack fucking Twist.

Amando a Jack. Así quiero vivir el resto de mis días.
Así me dio el amor en la cara, amando a Jack mientras le golpeaba.
Amando a Jack sin saberlo viví antes de nuestro primer reencuentro.
Los días que pasan entre nuestras citas existen porque no dejo de amarle.
No hay nada mejor que amar a Jack.

Y así será hasta nuestro próximo y definitivo encuentro.
Da igual lo que tarde en llegar, porque vivo para amarle.

Dalia, perdona por el exceso, pero tengo un día tontorrón...

Dalia dijo...

Solo Max, gracias por tu comentario tan hermso y largo, me gusto mucho tu interpretación de lo que significa amar a Jack.

Si Pon, esas pildoras llenan sus vidas y la mía de sonrisas y suspiros.

Anónimo dijo...

Dalia, gracias por compartir con nosotros esos momentos tan felicesd e nuestros Jack y Ennis, en la pelicula se ve tan poco de esa felicidad, pero se ve compensada con los relatos preciosos que tanto tú como los demas fans hacen!


saludos!

un-angel dijo...

...entro en tu casa a repasar las lecturas pendientes y que malos ratillos paso, estos vaqueros me "matan"... esta gripe BBM no se me pasa nunca...
Un besito