jueves, febrero 12, 2009

Día de la Juventud en Venezuela


Hoy 12 de febrero, se celebra el Día de la Juventud en Venezuela conmemorando aquel día de 1814 cuando José Félix Ribas y un grupo de jóvenes de la Universidad de Caracas y seminaristas libraron y ganaron la Batalla de la Victoria.

El hecho de que se recuerde con especial orgullo esta Batalla de tantas que se libraron en su época, es por el hecho de que todos eran jóvenes inexpertos, muy pocos habían tomado alguna vez un fusil en sus manos, pero sin embargo, después de haber dejado protegida Caracas, se reunieron y marchron al frente, y aunque no eran más que 1500 improvisados soldados, se enfrentaron al Ejercito de 2500 soldados realistas al mando de Bóves y Morales.

Después de casi un día de batalla y cuando todo parecía perdido y muchos habían muerto, logró llegar al campo de batalla Vicente Campo Elías con 220 soldados más, lo cual dio el empuje para que el casi vencido ejército lograra vencer una batalla en la que no tenían ninguna ventaja.

Hoy en día, el Día de la Juventud se ha vuelto un símbolo de la Sociedad en la que vivimos, cuando son los mismos jóvenes venezolanos, los estudiantes universitarios en su mayoría, sin distingo de clases económicas, universidades públicas o privadas, o algun otro tipo de barreras, los que están sacando adelante las ganas de surgir de este país.

Son los jóvenes los que marchan día a día, ya no con fusiles, sino con banderas y canciones, con sus libros en un morral, exigiendo el respeto y la democracia que con tanto sacrificio ya habíamos logrado en Venezuela.

Son los estudiantes universitarios, los guardianes y testigos de mesa, auditores y defensores de los votos en las elecciones de Venezolanas desde que el tirano ha tratado de aplastarnos sino estamos de acuerdo a sus dictámines.

Son los estudiates universitarios, los que reciben el maltrato, las bombas lacrimógenas, los golpes de rifles de la mal llamadas Guardia Nacional y Policía Metropolitana cuando manifestan libremente su derecho constitucional de manifestar, y sin embargo, ahí siguen: con sus asambleas universitarias para discutir la Enmienda, con sus marchas, con sus canciones, y con su planificación impecable y eficaz de la defensa de los votos de todos los venezolanos.

Por eso más que nunca, hoy se debe celebrar el Día de la Juventud Venezolana, se debe celebrar a los jóvenes de edad y de espíritu que no se doblegan a la adveridad y se crecen en valor, sacrificio y determinación en defender la Libertad.

Ojalá todos aprendamos de su ejemplo, todos sigamos apoyándolos en su senda, y todos podamos seguir aportando a las juventudes futuras el valor de la Libertad y la democracia, para que siempre hayan jóvenes en Venezuela capaces de lograr una Batalla de la Victoria, no de sangre, sino de letras, conocimientos, hechos y valores.

4 comentarios:

Marga dijo...

Sin ninguna duda todos deberíamos aprender de esa juventud venezolana que no tiene miedo al tirano, que lucha por la justicia, que expone su vida por la libertad.

Un recuerdo para aquellos que creyendo perdida la batalla no echaron la toalla y al final consiguieron la victoria.

Que esa nueva victoria que tanto mereceís, llegue de nuevo muy pronto.

Una celebración muy especial, sin duda, muy emotiva.

Que tu día de la juventud sea genial preciosa.

Un beso enorme

Mar del Norte dijo...

Ojalá, Dalia, ojalá...

Rosa dijo...

Te dejo los versos de la genial Violeta Parra, que vienen muy bien paa todos aquellos jovenes que luchan con la bravura de sus ideales y sus sueños.

¡Que vivan los estudiantes,
jardín de las alegrías!
Son aves que no se asustan
de animal ni policía,
y no le asustan las balas
ni el ladrar de la jauría.
Caramba y zamba la cosa,
¡que viva la astronomía!

¡Que vivan los estudiantes
que rugen como los vientos
cuando les meten al oído
sotanas o regimientos.
Pajarillos libertarios,
igual que los elementos.
Caramba y zamba la cosa
¡vivan los experimentos!

Me gustan los estudiantes
porque son la levadura
del pan que saldrá del horno
con toda su sabrosura,
para la boca del pobre
que come con amargura.
Caramba y zamba la cosa
¡viva la literatura!

Me gustan los estudiantes
porque levantan el pecho
cuando le dicen harina
sabiéndose que es afrecho,
y no hacen el sordomudo
cuando se presenta el hecho.
Caramba y zamba la cosa
¡el código del derecho!

Me gustan los estudiantes
que marchan sobre la ruina.
Con las banderas en alto
va toda la estudiantina:
son químicos y doctores,
cirujanos y dentistas.
Caramba y zamba la cosa
¡vivan los especialistas!

Me gustan los estudiantes
que van al laboratorio,
descubren lo que se esconde
adentro del confesorio.
Ya tienen un gran carrito
que llegó hasta el Purgatorio
Caramba y zamba la cosa
¡los libros explicatorios!

Me gustan los estudiantes
que con muy clara elocuencia
a la bolsa negra sacra
le bajó las indulgencias.
Porque, ¿hasta cuándo nos dura
señores, la penitencia?
Caramba y zamba la cosa
¡Qué viva toda la ciencia!

Dalia dijo...

Gracias por sus comentarios.